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Muchos visualizábamos el futuro de los videojuegos con impresionantes simuladores que eventualmente serían imposibles de diferenciar de la realidad. Ya estamos casi en el 2012 y no mucho ha cambiado; seguimos frente a un televisor y aunque hemos dado un paso adelante en abandonar las interfaces tradicionales, ese paso se ha tenido que dar atrás, ya que sencillamente no es lo mismo.

Pero si tenemos un show de TV con varios miles de dólares de presupuesto y un pretexto medianamente bueno, podríamos intentar hacer un simulador next gen. Esto es precisamente lo que hizo The Gadget Show, un programa de origen inglés que podría haber creado la máquina de nuestros sueños.. o algo muy parecido.

Esta es de una de esas ideas que parecen ser excelentes hasta que nos ponemos a pensar un poco más en ellas. Primero, ha de ser absolutamente agotador estarse moviendo tanto, además de que la banda sin fin no ha de ser la cosa más estable del mundo. En segundo lugar, creo que ser disparado no le agrega mucho al factor de adicción y por último, pero no menos importante, el juego no está diseñado para esto; los programadores no tomaron en cuenta que cuando nos disparen, de verdad nos duela y perdamos tiempo o concentración en eso, tampoco en tener tanta actividad física.

Recordemos que uno de las características más importantes de los videojuegos son sus consecuencias, o más bien, la falta de estas. No soy experto en temas de psicología lúdica, pero no me parecería exagerado decir que el otro factor es la evidente diferencia de castigos; jugar gotcha es entretenido por el aspecto social y porque tienen más o menos la misma oportunidad de ser golpeado. En un FPS tradicional, el enemigo —la computadora o un jugador real— no sufre al ser disparado, ni nosotros al morir. Creo que un jugador dejará de pensar en muy poco tiempo en “jugar” y más en “sufrir”.
De la vialidad económica, tecnológica y comercial ya ni hablemos. Algunas cosas se deben quedar en un monitor por una muy buena razón.

(Perpetrado de reddit)